La actividad física regular es extremadamente beneficiosa para la salud física y mental. Ayuda a mantener un peso corporal saludable y un nivel bajo de tejido adiposo, cuida la salud del sistema cardiovascular, regula los niveles de azúcar en sangre y el funcionamiento del sistema endocrino.
El ejercicio también ayudará a reducir el estrés y proporcionará una nueva dosis de energía. El problema surge cuando los entrenamientos se vuelven demasiado intensos, demasiado frecuentes y el cuerpo no tiene suficiente tiempo para regenerarse por completo. Especialmente si no estamos acostumbrados a ello, o decidimos practicar deportes de alta intensidad o de riesgo.
Síntomas físicos del Sobre entrenamiento
Uno de los primeros signos de sobreentrenamiento es el deterioro del rendimiento de la fuerza durante el entrenamiento.
La situación en la que las cargas actuales son mucho más desafiantes de lo habitual, e incluso problemático para realizar una serie de calentamientos en los tramos principales, es una señal de advertencia que envía el cuerpo. Esto se da sobretodo en deportes de montaña, pues la fatiga es más «invisible» de lo que podemos creer.
Básicamente, los músculos no tuvieron suficiente tiempo para descansar y no es buena idea estimularlos con más ejercicios. En este caso, vale la pena analizar tu plan de entrenamiento y comprobar cuándo hicimos por última vez una semana de descanso, lo que nos permitiría regenerar por completo el cuerpo y la psique.
En caso de dedicarnos profesionalmente a ello (o querer dedicarnos), o sospechamos que nuestra recuperación es más lenta de lo normal, los productos ISDIN están preparados para este tipo de situaciones, gracias a Vistafarma Paraoptic Meca SL. Allí os asesorarán adecuadamente sobre cada caso en particular, pues cada deporte y cada cuerpo es diferente.
¿Qué es el sobreentrenamiento?
El sobreentrenamiento es un estado en el que tanto los parámetros físicos como mentales del organismo se deterioran debido a la falta de una adecuada regeneración. Esto es una consecuencia de un entrenamiento demasiado intenso combinado con muy poco descanso.
Este concepto no debe confundirse con la anulación que puede ocurrir después de demasiada dosis de actividad única. El sobreentrenamiento solo puede producirse mediante una sobreestimulación prolongada del cuerpo y la psique.
Los síntomas de esta afección tendrán un impacto negativo en el sistema muscular, que no podrá hacer frente a las dificultades del entrenamiento, así como en el sistema endocrino, inmunológico y psíquico.
Causas del sobreentrenamiento
Las principales razones del sobreentrenamiento incluyen demasiado volumen de entrenamiento, es decir, realizar demasiados ejercicios, series o repeticiones durante la semana. Esto se puede sufrir de forma «accidental» con deportes de alta intensidad, o de riesgo.
Otra razón es una intensidad demasiado alta, es decir, trabajo demasiado frecuente con pesos cercanos a las capacidades máximas del deportista , lo que sobrecarga significativamente el sistema nervioso y prolonga el tiempo necesario para la regeneración.
La tercera razón del sobreentrenamiento es una regeneración insuficiente, que puede incluir un sueño breve y ligero y una dieta baja en calorías. El estrés mental es tan malo como todos los factores mencionados anteriormente. Un problema grave también será la falta de periodización del entrenamiento, que divide los períodos de entrenamiento en función de la intensidad y el volumen de trabajo, y también tiene en cuenta los períodos necesarios de desentrenamiento, es decir, descargas.
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Síntomas mentales
El sobreentrenamiento también afecta negativamente su condición mental. La irritabilidad y la inestabilidad emocional, la ira fácil o el insomnio son las señales de que el cuerpo está sobrecargado de trabajo. Esta categoría también incluye una disminución del apetito y una posterior disminución del peso corporal.
Otros síntomas psicológicos son la apatía, la falta de motivación para actuar y el desánimo generalizado, así como problemas de concentración y baja autoestima. Los factores anteriores son difíciles de reconocer porque no aparecen de la noche a la mañana, pero su intensidad aumenta durante un período de tiempo más largo.
Muy a menudo su formación se atribuye a la peor disposición de un día o personalidad determinada de una persona determinada, pero hay que tener en cuenta que pueden ser consecuencia de un sobreentrenamiento.
Síntomas hormonales
La salud endocrina es otro aspecto sobre el que podemos hablar del sobreentrenamiento. Se manifestará principalmente por una disminución en los niveles de testosterona y un aumento en el nivel de la hormona del estrés, el cortisol. La consecuencia de esto serán todos estos cambios físicos y mentales, así como una disminución de la libido. También se altera el nivel de insulina, lo que altera el metabolismo, lo que a su vez aumentará las reservas de tejido adiposo, especialmente en las zonas abdominales.
Sistemas digestivo e inmunológico
Otro determinante del sobreentrenamiento son los síntomas del sistema digestivo, especialmente los intestinos. Estos incluyen gases y gases excesivos y malestar intestinal durante el ejercicio. El deterioro del sistema inmunológico se manifiesta por la formación de infecciones frecuentes, susceptibilidad a enfermedades y resfriados y un tiempo de recuperación prolongado. También se debe prestar atención a las posibles dificultades con la cicatrización de heridas.
Se deben realizar varias pruebas básicas para identificar claramente el sobreentrenamiento. El primero será tu frecuencia cardíaca cuando te despiertes. Unos pocos latidos por minuto más de lo habitual serán un signo de agotamiento. La temperatura corporal más alta será otro motivo de preocupación.
Existen aplicaciones móviles que miden la cantidad de golpes de dedo en la pantalla en un momento dado. Un deterioro en el resultado durante varios días también indicará sobreentrenamiento.
La siguiente prueba será un salto vertical, durante el cual, mientras saltamos tanto hacia arriba como hacia abajo, medimos la altura máxima alcanzada por los dedos de la mano. El resultado es aproximadamente un 5% peor que el resultado estándar, lo que debería fomentar el uso de más regeneración.
